Cumplimos una década, diez años desde nuestro humilde comienzo a este presente, donde pasamos de ser una empresa pequeña a mediana y hoy somos una gran empresa.
Esta noche podríamos hablar de los miles de afiliados que optaron por nosotros, de los miles de metros construidos, de nuestro crecimiento constante, de nuestros balances superavitarios.
En definitiva: podríamos hablar de todo lo que hemos hecho o compartir juntos lo que soñamos y lo que esperamos hacer en la próxima década.
El pasado, aunque venturoso, es sólo una referencia; y como lo que nos gusta es subir la montaña, más que llegar a la cima, hablaré del futuro.
Empezamos siendo financiadores, pero a partir del próximo año también seremos prestadores de servicios cada vez más numerosos.
Empezamos siendo una pequeña Obra Social y nos encaminamos a ser además de una importante Obra Social, una gran mutual, con planes de salud de excelencia y prestación de servicios para afiliados, para socios y también para terceros.
Continuaremos mejorando nuestros servicios de salud en forma permanente, sin meta de llegada.
Inauguraremos el año próximo nuestra nueva sede en Venezuela 1146; un edificio propio que además de su belleza estética significará una mejora para nuestro personal y nuestros afiliados.
Seguiremos cuidando nuestros recursos, ya que si una empresa no es sustentable pierde el futuro para sí misma, para su personal y para sus afiliados.
Seguiremos adaptándonos y cambiando cada vez que la realidad nos lo indique y sobretodo: seguiremos trabajando cada día más y mejor para superarnos.
Nuestros afiliados seguirán siendo nuestra mayor preocupación e interés.
Seguiremos siendo parte de la marca España, lo que nos enorgullece más que ningún otro logro.
Seguiremos siendo gallegos, que es nuestra forma de ser españoles y también argentinos, por nacimiento, por sangre o por adopción, sin ningún conflicto por nuestra naturaleza tripartita ya que somos patriotas, pero no nacionalistas.
Escribió Camilo José Sela “El nacionalista cree que el lugar donde nació, es el mejor lugar del mundo, y eso no es cierto. El patriota cree que el lugar donde nació se merece todo el amor del mundo y eso sí es cierto”.
No se trata de creer que España y Argentina, son los mejores países del mundo o que Ospaña es la mejor empresa de Salud.
Se trata de querer a nuestros países y a nuestra empresa con todo el amor del mundo. Este es nuestro Norte.
Preferimos mirar para adelante, consideramos que la mejor recompensa por un trabajo bien hecho es poder seguir haciéndolo.
Creemos haber hecho una labor digna en esta década que cumplimos y nuestra mejor recompensa es poder seguir haciéndolo en la década que ahora empieza.
Necesito mirar un poco para atrás. No para destacar lo hecho sino para agradecer porque es necesario y de bien nacido hacerlo. Por eso, permítanme decir:
-GRACIAS a la embajada de España y a la Consejería de Empleo, que nos han acompañado y respaldado en estos diez años, lo cual ha sido fundamental para nosotros:
-GRACIAS al Directorio que me acompaña y a los anteriores, ya que siempre existió un clima de armonía y respeto que nos permitió trabajar pensando en qué era lo mejor para OSPAÑA.
-GRACIAS al personal de nuestra empresa, Gerente, Jefes, administrativos, médicos, que indudablemente tienen la camiseta de OSPAÑA pintada en la piel.
-GRACIAS a nuestros aliados estratégicos: OSDE, MEDIFE, SIMECO, HTAL BRITANICO, OSPEPYN, H DE MAR DEL PLATA, OSOCNA, CASA, que nos permitieron crecer y llegar a todo el país con el nombre de OSPAÑA.
Y sobre todo GRACIAS a los miles y miles de afiliados que cada mes optan por nuestra Obra Social y permanecen en la misma, confiándonos su salud.
Jorge Luis Borges, recuerda en su poema “a un poeta sajón”, los versos escritos por la recuperación de su tierra, por el Rey, de lo que luego sería Inglaterra, y que estaba en manos de los vikingos.
Nadie recuerda hoy, el nombre del autor de esa oda, pero 1.000 años después, sus versos son recordados.
Escribe Borges, en el final de esta poesía:
“Pido a mis dioses o a la suma del tiempo que mis días merezcan el olvido, que mi nombre sea Nadie como el de Ulises, pero que algún verso perdure en la noche propicia a la memoria o en las mañanas de los hombres”.
Permítanme a mí, sin la belleza literaria de Borges, pero con la misma ilusión, pedir también que nuestros días merezcan el olvido, pero que nuestro poema, ese sueño compartido, OSPAÑA, perdure en el tiempo por muchas, muchas décadas más.
Gracias a todos ustedes por acompañarnos en nuestros sueños, esta década pasada y por acompañarnos hoy en nuestro festejo. De verdad, muchas pero muchas gracias.